Via Los Tiempos
Santa Cruz es la ciudad madre de la autonomía, y el instrumento normativo que gerencia esa autonomía es el «Estatuto Autonómico Departamental». Desconocer este principio, es desconocer una lucha de más de una década por consolidar la vocación autonómica de Santa Cruz, a través de la definición que establece el primer artículo de la constitución política del estado del 2009, reconociendo «Una Bolivia con autonomías». Y para ejercer esta autonomía, Santa Cruz, ha aprobado su «Estatuto Autonómico Departamental» que rige la vida institucional de la Gobernación Cruceña; es decir define las reglas para administrar la institución más importante del departamento de Santa Cruz. Y al TCP, no le quedó otra que fallar de ese modo, porque el derecho es potestativo; se lo ejerce. Y el Art-25 del Estatuto autonómico departamental es claro «Ante la ausencia temporal del gobernador o gobernadora, se produce la suplencia gubernamental, por tanto, asume el vicegobernador, o vicegobernadora». No se puede aprobar un partido de ajedrez, y durante el juego, pretender modificar las reglas, como intentan hacer los que pidieron al TCP una complementación y enmienda, amparados en una ley departamental «293 que regula casos de ausencia temporal» aprobada el pasado marzo del 2023. Al respecto, la ALD debió remitir a las instancias jurisdiccionales para que verifiquen la constitucionalidad de esta ley; antes que el TCP haya emitido su fallo, porque si esto ocurría se hubiera generado la obligación de verificar y pronunciarse conforme a los resultados de su revisión; pero esto no ocurrió así; por tanto, el ideario de Svonko Matkovic persigue que «Las sentencias constitucionales se escriban por lenguaraces en los medios de comunicación, y luego los magistrados las suscriban», lo cual es absolutamente imposible. A veces quienes parecen ser los más autonomistas, terminan siendo los más despóticos.
Lamentablemente los auto etiquetados como «líderes» en Santa Cruz, se esfuerzan por crear una sociedad dividida y sobrexcitada por “volcar el ánimo social cada vez más al extremo”, cultivando en redes sociales un macartismo de caricatura. Y llamando a la defensa del Gobernador Luis Fernando Camacho aduciendo que “Hay que defender a Camacho, aunque no haya hecho nada como gobernador, porque es nuestro gobernador electo”. Sinceramente «cuanta nostalgia en la zafra patrón».
El autor es especialista en gestión pública, autonomía, y comunicación institucional