Rolando Reinaga Grajeda, denunció irregularidades en la habilitación de cuatro postulantes, que pese a ser impugnados, finalmente quedaron habilitados. En primera instancia, Reinaga habló del caso del magistrado prorrogado José Antonio Revilla, que ahora pretende constituirse en autoridad del TCP (Tribunal Constitucional Plurinacional), sin cumplir lo que manda la norma respecto a «especialidad en materia constitucional, derechos humanos), ya que Revilla ejerció en el Tribunal Supremo de Justicia, como magistrado de la sala civil social, por tanto, pese a incumplir la especialidad, fue habilitado para ser candidato. Por otra parte esta el caso de la académica Fatima Tardio, que no acredita ni un solo año de experiencia en materia constitucional, toda vez que simplemente se limitó a ejercer la docencia, sin embargo también fue habilitada, restando credibilidad al proceso. Por otra parte Grajeda, hablo de un caso mucho más complicado en el que se fraguó información, y méritos que corresponde al de Angel Edson Rojas Davalos, que incluso cobró sueldos que no correspondían, además de alterar documentos colaborado por algunos funcionarios del Tribunal Departamental de Justicia. Este tipo de situaciones pone en entredicho la seriedad y el rigor del proceso de pre selección.